Las alfombras de pelo corto nos pueden ayudar a resolver una de las dudas más habituales que surgen al escoger alfombra: si debemos elegir una alfombra de superficie lisa o una alfombra con pelo.
Y la duda tiene sentido, ya que mientras que las alfombras con pelo suelen ser más acogedoras y hogareñas, sobre todo si buscamos una alfombra de salón de pelo corto, también hay que reconocer que son más proclives a acumular polvo y suciedad y por tanto más complicadas de limpiar y mantener.
Por el contrario, las alfombras de superficie lisa no retienen la suciedad y evitan la formación de ecosistemas de polvo y pelo (especialmente importante si hay mascotas), lo cual las hace muy prácticas, ya que no queremos invertir nuestro precioso tiempo en el mantenimiento de las alfombras.
Pero las alfombras de superficie lisas pueden parecer frías en ocasiones, sobre todo dependiendo el tipo de material. Hay una cierta calidez que una alfombra sin pelo nunca podrá ofrecer, especialmente para determinados estilos de decoración.
Alfombras con pelo, una calidez inigualable (H2)
Por eso, si te es difícil renunciar a una alfombra con pelo, las alfombras de pelo corto para salón o cualquier otra pieza de la casa vienen al rescate, ya que en su término medio han encontrado la virtud.
Porque una alfombra de pelo corto ofrece lo mejor de los dos mundos.
Por un lado te ofrecerán un ambiente más hogareño y agradable, con esa sensación que ofrece la pisada y el tacto del pelo.
Y por otro, el pelo corto no dará muchas opciones a la acumulación de polvo, y si la alfombra está confeccionada con materiales resistentes y lavables como polipropileno o poliamida la podrás limpiar con facilidad y sin miedo, tanto con aspirador como, según qué modelos, incluso con una esponja.
Alfombras de pelo corto: textura y relieve con mínimo grosor (H2)
Las alfombras de pelo corto admiten una variedad de texturas que una alfombra de superficie lisa nunca podrá igualar. Porque su estampado está formado por puntadas, mucho más finas y detallistas que los nudos de las alfombras sin pelo.
Las alfombras de pelo más corto, como por ejemplo las de viscosa, son finísimas ya que apenas miden 3 ó 4 mm de grosor, a pesar de lo cual nos ofrecen el pelo recortado a varios niveles formando relieve con texturas llenas de vida.
Otros tipos de confección nos ofrecen alfombras de menos de 1 cm con infinitas posibilidades y texturas para decorar de manera cálida sin recargar excesivamente los ambientes y sin complicarnos el mantenimiento.
Y si no queremos alfombras con diseños llamativos ni relieves, una sencilla alfombra de color liso de pelo corto nos ayudará a decorar con el color. Las alfombras de color liso son ideales para crear ambientes discretos regulando la temperatura del ambiente con maestría.
En resumen, si te gustan las alfombras con pelo, no renuncies a ellas y encuentra la solución perfecta con una buena alfombra de pelo corto.
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